Etiquetas

sábado, 9 de noviembre de 2019

Lycium intricatum, espino (de mar)

Lycium intricatum, espino (de mar)


En el blog Cuaderno Medioambiental de Juan Mompeán acabo de publicar una entrada sobre esta singular planta que es de una importancia vital en muchos lugares de Lanzarote. Este es el enlace: 
Según Flora Vascular de Lanzarote espino a secas es su nombre vernáculo. En Flora Canaria de P. e I. Schönfelder aparece espino de mar como nombre vulgar.
 

martes, 25 de junio de 2019

Ruta nocturna por Mtña Faja, Haría

Ruta nocturna por Mtña Faja, Haría, Lanzarote 17-06-2019

 En el marco del programa de festejos del santo patrón de Haría, S. Juan, con el patrocinio de Departamento de Juventud del municipio y la colaboración de Senderismo de Lanzarote, dimos una vuelta circular por las calles del pueblo y accedimos al "Pino de Flora" en Montaña Faja. Una ruta nocturna guiada muy interesante y con buena compañía.
Como se aprecia en el gráfico adjunto, llegamos aproximadamente a los 390 m de altura (la exactitud del programa Wikiloc es relativa).
Recorrido de alrededor de 6 km que iniciamos a las ocho y veinte y completamos a las once de la noche, con un tiempo en movimiento de una hora y tres cuartos, ya que se realizaron numerosas paradas para admirar el paisaje y atender las explicaciones de Bea, la guía de Senderismo de Lanzarote.
El municipio de Haría se haya enclavado en el extremo NE insular, la zona más fértil de la isla por su mayor pluviosidad y capacidad de captación de la maresía y humedad procedente de los alisios. Se engloba en su mayoría en el Macizo de Famara salvo los tramos de isla baja que van desde El Charco del Palo y Mala hasta Órzola. Este antiguo macizo es una estructura volcánica miocénica en   escudo (erupciones fundamentalmente de tipo hawaiano)  que se originó hace 9-4 Ma en tres etapas  de efusiones masivas intercaladas por períodos de inactividad. La erosión ha modelado  el territorio, desmantelándolo profundamente sobre todo en el sector oriental dejándonos el impresionante farallón del Risco de Famara. A partir de 2,5 Ma se producen nuevas erupciones, ahora con menor efusividad y cadencia; fundamentalmente de tipo estromboliano,  que rejuvenecen el paisaje con conos volcánicos y coladas lávicas: La Atalaya, más antigua y erosionada, de la serie II-A  y las más recientes de La Quemada de Máguez, Los Helechos-La Cerca, La Corona y La Quemada de Órzola del primer tipo y El Malpaís de La Corona del segundo.


Haría es una antigua localidad cabeza de municipio que está enclavada en el valle que lleva su nombre. Por ella transcurre el Bco de Ternesía (según A. Pallarés y GRAFCAN y Tenesía en el IGN), que arranca en el mismo pueblo aunque en realidad recoge aguas de la zona de El Rincón y de El Valle del Malpaso (la cabecera de éste último se conoce como Bco de Elvira Sánchez). En general mantiene una arquitectura tradicional que es la admiración de propios y extraños.
Arrancamos la marcha desde la Plaza de Haría, donde está la iglesia. Es una lástima que en lugar de demoler la antigua no se restaurara. La nueva no concita mucho entusiasmo que digamos. Al pasar por la plaza de La Constitución donde se ubica el Ayuntamiento, nos detenemos para observar uno de los muchos pozos que hay en la localidad. Algunas personas participantes que son harianas ("jarianas") corroboran lo que en tal sentido afirma la guía. La cultura del agua es algo omnipresente por estos pagos.
 
Vista con el sol de atardecida de Montaña Faja


A continuación tomamos al SO la calle del Puente que seguimos, y, antes de que se convierta en la de Elvira Sánchez giramos a la izquierda por calle Las Eras por la que continuamos hasta su confluencia con la ctra de La Villa de Teguise.

Aquí volvemos a parar y escuchar las explicaciones de nuestra interlocutora sobre el lugar con especial hincapié en "el pino de Flora".
A renglón seguido cruzamos la carretera por la que discurrimos hasta llegar a la senda de subida a la montaña que va paralela a una barranquera. La ligera pendiente se hace llevadera, sólo hay que tener cuidado en donde se pone el pie porque el paso frecuente de las mountain bike ha dejado su impronta horandando la vía por el centro.

Pequeña muestra de por qué llaman a este pueblo con el apelativo de las 10.000 palmeras
A mitad de la cuesta hacemos otro alto para recuperar el aliento, continuar con las explicaciones y admirar la extraordinaria belleza del entorno.


Después seguimos ascendiendo mientras el sol va ocultándose a nuestras espaldas
Espectacular vista mientras anochece sobre el pueblo de Haría

En segundo plano La Atalaya (de Haría), al fondo Los Helechos y La Corona

hasta completar la ascensión al lugar donde Flora subía para "olvidarse del mundanal ruido" -la verdad es que en Haría, aún hoy, ruido, lo que se dice ruido, más bien poco-. Hoy sólo queda el tronco seco y el intento de reponerlo tampoco ha cuajado. 
Hace más de treinta años que no subía aquí, entonces con los hijos pequeños, unas veces con Alejandro y su familia y en una ocasión con Gorgonio -que en gloria esté- y la suya. Entonces hacia un pelete respetable y hoy el estar se hace muy agradable. Como permanecimos un buen rato contemplando el entorno al final tuve que ponerme un cortavientos para evitar que el sudor terminara enfriándose.
Si el panorama por poniente era impresionante no os cuento como lo era por el naciente.

Mientras Osiris se esconde por occidente, Isis aparece al oriente en busca de su amado -así todos los días, desde que tierra, luna y sol conviven en este universo-, dejándonos estampas de deslumbrante belleza

Como no era cuestión de pasar la noche en la montaña,
no nos quedó más remedio que bajarnos del éxtasis y de la nube contemplativa y seguir con la ruta con el único consuelo de que esta transcurriría un buen trayecto con Selene a nuestra vista



Al principio seguimos una linde marcada por un pequeño muro de piedra hasta enlazar con un camino con señales manifiestas de necesitar mantenimiento, girando entonces hacia el sur


hasta alcanzar el borde NE del inmenso lomo que arrancando de La Montaña, El Filo del Cuchillo y Mtña Faja, separa el Valle de Temisa del de Haría.
Allí volvimos a detenernos y en plena oscuridad, salvo las luces de Tabayesco y de las poblaciones costeras junto con lo que alumbraban las linternas nada se veía, salvo sombras de los lugares que nos iba diciendo nuestra guía. 

Acompaño aquí una panorámica diurna del Valle de Temisa como contrapunto de las siguientes imágenes nocturnas.
Luna llena sobre el mar, Tabayesco iluminado y lado SE del Valle de Temisa ya en su tramo final

Arrieta y Tabayesco. Imagen de móvil

Misma toma, ahora con cámara NIKON
Estas dos imágenes están realizadas desde el mismo lugar, la primera con un móvil en modo automático y la segunda con una cámara réflex de forma manual con una sensibilidad alta y la velocidad algo baja para evitar el efecto de trepidación (ISO 2000, f/7.1 y velocidad de obturación 1/125). Para conseguir mejores efectos con la segunda habría que haber hecho fotografía de larga exposición y el empleo de un trípode, lo cual es muy complicado de hacer en una ruta de este tipo. Queda para mejor ocasión.

Después reemprendemos la marcha en dirección E siguiendo el camino que termina entroncando con otro que se ve más transitado y en mejores condiciones. A la altura de Tegaso giramos entonces a la izquierda, al N y seguimos por la ladera E de Mtña Faja que atraviesa la cabecera de dos barrancos que A. Pallarés denomina como los gemelos de Los Rincones y GRAFCAN como Las Narices. La guía y los lugareños hablan del Bco de Las Piletas y de restos arqueológicos. A la altura del cementerio ya tenemos carretera asfaltada, paramos para reagruparnos y decidir qué hacer. Optamos por seguir por la carretera que viene de Arrieta hasta llegar a la ermita de San Juan donde se dan las pertinentes explicaciones por parte de nuestra guía y la ayuda de los oriundos de la zona. Volvemos al punto de partida por el Bco. de Ternesía.
No cuento con imágenes de esta última parte. Queda pendiente una revisión de este artículo.
En resumen, una velada muy agradable, por el lugar y la compaña.



Para saber más:


  • Eduardo Hernández-Pacheco "Por los campos de lava. Relatos de una expedición científica a Lanzarote y a las Isletas canarias. Descripción e historia geológica (1907-1908)" Ed. de Torcusa para la Fundación César Manrique  Madrid 2002
  • VV. AA. "Geografía. Lanzarote: Geografía de un espacio singular" Cabildo de Lanzarote. Gran Canaria 2002.
  • Carmen Romero "El Relieve de Lanzarote" Cabildo de Lanzarote Gran Canaria 2003
  • VV. AA. "Parque Nacional de Timanfaya. Guía geológica" IGME y Everest. León 2010.
  • Agustín Pallarés "Diccionario de topónimos de Lanzarote" Ed. Remotas Gran Canaria 2014.
  • http://www.geoparquelanzarote.org/
  • Jaime Gil y Marta Peña "Flora Vascular de Lanzarote" Cabildo de Lanzarote Gran Canaria 2018.
  • http://biologiayctma.com/floralanzarote/

martes, 18 de junio de 2019

Desde Caldera Gaida hasta Uga: un paseo por la espina dorsal del levante lanzaroteño

De Gaida a Uga, itinerario lineal


El sábado 16 de marzo del año en curso 2019 realizamos nuestro mensual recorrido por tierras conejeras (a veces nos saltamos la norma y salimos de la isla en incursiones memorables emulando a los vikingos pero empleando la fotografía como única arma, en este caso para inmortalizar momentos irrepetibles).



Antes de entrar en harina, un poco de Historia geológica de la Unidad Central de Lanzarote



Lanzarote y Fuerteventura, además de ser las islas más antiguas del archipiélago -de ahí su relieve menos accidentado-, comparten plataforma, asentándose sobre sedimentos procedentes del cercano talud continental africano (2.700 m por debajo del nivel marino).

Primero fueron  emisiones submarinas -piso basal- a las que siguieron  erupciones subáereas masivas en escudo -serie I- que levantaron Los Ajaches, Famara y el edificio Tías, muy desmantelados   en la actualidad por la acción de los agentes erosivos y el último además enmascarado por erupciones posteriores a las que nos vamos a referir ahora.



Tras una dilatada calma eruptiva que duró más o menos dos millones de años y en la que la erosión campó a sus anchas, la actividad volcánica regresó a la isla hace unos 2,5 Ma, pero con bastante menor intensidad, con erupciones de episodio único, tipo estromboliano -fundamentalmente-, hidromagmático, mixto o explosivo y de carácter fisural, en torno a fracturas o fallas,  siendo la dirección predominante la NE-SO (de esta época es la serie II: Mtña Roja y  Mtña Bermeja en Los Ajaches, Mtña Tenézara, Alineación Mtñas Zonzamas-Maneje -sus coladas llegaron hasta Arrecife-, Caldera Blanca y edificio Guanapay).

Las emisiones posteriores, ya  de la serie III,   suceden a las anteriores prácticamente sin solución de continuidad  y  con alineamientos similares, paralelos o complementarios: volcanes de la zona oeste (El Golfo, Tremesana,...), centro norte (Calderas y Mtñas de Soo, Tamia,...), alineación Guardilama-Guatisea (asentada sobre los materiales del edificio Tías y probablemente por ello sus volcanes centrales se cuenten entre los de mayor altura de la isla, Guardilama 605 m, Mtña Blanca 596, Caldera Gaida 563, Mtña Guatisea 544, Mtñas Tesa y Tinasoria 504), del Archipiélago Chinijo (Mtña Amarilla, Agujas, ...) y edificio Tahiche (400.000 años de antigüedad, muy bien conservado en la actualidad).


Las erupciones recientes no históricas (serie IV) tienen lugar en el Archipiélago Chinijo y en la zona norte (La Quemada de Máguez, Los Helechos, La Corona, La Quemada de Órzola, etc.). Las históricas, también de la serie IV, se suceden en el sector centro-oriental insular (Timanfaya, sg. XVIII y Mtña Negra -Tao-, Tinguatón y Chinero o Volcán Nuevo del Fuego, 1824), y con ello rejuvenecieron y ampliaron sensiblemente la superficie de la isla.


Desde el punto de vista geográfico, el recorrido se desarrolla sobre el lado central y oriental de la espina dorsal que a lo largo de aproximadamente 25 km sigue la dirección fisural NE-SW (noreste-suroeste) ya comentada y corre paralela a lo largo de la costa levantina desde las Mtñas Téjida y Tinaguache en los aledaños de Costa Teguise y llega hasta La Mtña de La Majada en las proximidades de Uga y a las que cabría añadir también Caldera Gritana y Mtña del Desriscadero que cierran el Valle de Femés -yo creo que Maciot y La Atalaya apuntan en la misma dirección, ya fuera del sector central-.
Los conos o accidentes volcánicos más cercanos a Uga son encuadrables dentro de la serie II y por tanto más antiguos: Mtña de La Majada, Mtña Casa, La Caldereta, Mtña Mojón y El Norte (forman un único cráter) y Mtña Tinasoria. Mtña Guardilama y Caldera Gaida pertenecen a la serie III.
Desde la Mtña Bermeja aledaña a Playa Quemada (en Lanzarote hay varias con idéntico nombre) puede contemplarse la mayoría de los volcanes que conforman la espina dorsal lanzaroteña 
Parte de los conos de estos volcanes se haya recubierto  por una capa de mayor o menor espesor del rofe o lapizlli proveniente de las erupciones de siglos pasados (en la imagen anterior se observa el lado que tiene menos lapilli).
Hay que resaltar además la presencia en el entorno de dos barrancos: del Agua y del Obispo.


Entrando ya en el tema que nos ocupa, cuando el trayecto es lineal siempre quedamos en el punto de llegada y nos trasladamos luego al de salida tan solo con los vehículos necesarios. Esta vez me tocó hacer de taxista y guía hasta el lugar de donde arrancamos esta singular aventura. Dejamos por tanto la mayoría de vehículos en Uga y nos dirigimos en tres coches algo más arriba de La Asomada por el Camino de Gaida hasta el punto de inicio, ubicado a media altura de la ladera este del primer cono volcánico a culminar.
Como puede apreciarse en las imágenes,  el día se presenta nítido y diáfano, sin viento y con perspectiva de que tendríamos que soportar un sol de justicia, así que debatimos la conveniencia o no de continuar con el plan previsto.
 
Hay dos montañas con el nombre de Bermeja, la 1ª está entre Mtña Blanca y Güime y la 2ª entre Tesa - que parece pegada a M Blanca- y La Caldera de Medinilla



Dejando a nuestra espalda parte de la alineación volcánica ya mencionada, a un montañero más madrugador que nosotros que ya ha hecho cumbre en Tegoyo y unas privilegiadas vistas de la costa oriental..., al  fin optamos por subir a la primera caldera y evaluar después en función de las circunstancias.


Emprendimos la marcha a las 10:15, a una altura de 450 m y siguiendo el camino citado hasta alcanzar al poco tiempo el borde del cráter que en esa zona alcanza unos 480 m.,



adentrándonos en el interior del mismo cuyo punto más bajo se encuentra a 475 m.


Nos detuvimos unos momentos para volver a replantearnos el continuar con la expedición porque dentro de la caldera y con rofe se apreciaba más la "caló". Optamos por acercarnos al borde occidental ubicado a 550 m., ver el panorama y después...

Siguiendo la misma dirección oeste, subimos no sin cierta dificultad porque a la pendiente se sumaba el inconveniente de la arenilla volcánica que lastraba nuestros movimientos. 



Además de la vía que empleamos nosotros de atravesar por el interior del cráter, es posible circunvalarlo, bien empezando por el sureste, más cómodo o por el noreste, como puede apreciarse en recorridos anteriores.


Nada más acercarnos al borde oeste de la caldera se notaba una ligera brisa muy agradable y refrescante -lo normal es que el viento arrecie por estos lares con cierta intensidad debido a la altura y situación-.
Estamos sobre 550 m, tras 35 minutos transcurridos y 1 km de trayecto, más o menos. Las vistas de Timanfaya y La Geria son impresionantes, así que nos entretuvimos un poquito
con tales maravillas
 y las evoluciones de maquinaria pesada en el Paisaje Protegido de La Geria.


 





Como puede apreciarse en estas fotos, no es la primera vez que estábamos aquí, en el año dos mil cinco, algo más jóvenes y acompañados por docentes del norte de Europa, pasamos también una alegre y magnífica jornada por estos lares.





Al verificar que el tiempo parecía soportarse bien, optamos por continuar la travesía siguiendo  una estrecha senda que baja por la ladera oeste
Al llegar 135 m más abajo de desnivel y unos 400 de trayecto, nos detenemos brevemente en torno a una señalización de senderos ubicada
entre Gaida y Guardilama.
Después la mayoría del grupo opta por bajar hasta el camino que lleva a Tinasoria y por donde transcurre el GR-131 (gran recorrido) que atraviesa toda la isla,
y unos pocos nos decantamos, ya "questamos" aquí, por subir a la cima de Mtña Guardilama
siguiendo el borde sureste  en dirección suroeste

La senda es cómoda de transitar aunque tenga algunos tramos con más desnivel que otros. Como puede apreciarse claramente en las imágenes predomina el color rojizo, propio de los volcanes de la época.
Las rocas adoptan formas caprichosas que se prestan a que entre en juego la imaginación del caminante.
Culminamos cumbre (605 m) pasadas las once y media y algo más de dos km (ad initio) y 135 m de  cuesta. 

La visita a la caldera la dejamos para otra ocasión. He aquí imágenes de otras incursiones
La caldera es un impresionante cráter cuyo interior quedó parcialmente cubierto por las cenizas de Timanfaya y que los lugareños han aprovechado para cultivar viña y árboles frutales con ese peculiar "zoco" semicircular tan característico de la isla.








Volviendo a la actividad que nos ocupa, tras un breve descanso en la cima de Guardilama, siendo aproximadamente las doce menos veinte, bajamos  por una empinada senda que serpentea por la cara sur, 190 metros de desnivel en menos de un km de distancia

con la intención de juntarnos con el otro grupo que nos esperaba en la confluencia del sendero de gran recorrido citado con el que lleva directamente a Montaña Tinasoria

 pero al llegar ellos ya habían iniciado el camino de subida y nosotros
Se aprecia claramente marcada la senda de subida por la cara sur de Mtña Guardilama
 nos entretuvimos brevemente en admirar la construcción abandonada ubicada en el mismo borde del cráter y el ingenio humano para aprovechar la poca agua de lluvia que cae por la región.


El lugar es aprovechado también como plataforma de lanzamiento para los amantes del vuelo sin motor tipo parapente o ala delta

Punto más alto al que llegamos el día de la fecha en la ruta por La Geria
Siguiendo con el pateo primaveral del 2019, aproximadamente a las 12:30, con unos 4 km a las espaldas, culminamos cumbre a 504 m.s.n.m y aprovechamos para descansar, tomar un ligero refrigerio, admirar el paisaje y disfrutar de la grata compañía.

La panorámica del Macizo de Los Ajaches es espectacular. Se aprecia también lo que nos queda de marcha hasta alcanzar nuestro destino, la población de Uga.





Pasadas ligeramente las una del mediodía reemprendemos la marcha bajando por el borde en dirección NO hasta alcanzar el punto más bajo de éste por el oeste, y al lado de unos salientes rocosos iniciamos la bajada por la vertiente SO, la cual está tamizada por abundante arenilla volcánica y nos sirve de amortiguador
en el  casi frenético descenso, mientras nuestro guía
nos ha tomado una considerable ventaja. En esta toma se aprecia claramente que Mtña Mojón "consiste (...) en la mayor parte de un cono volcánico, de poco más de 0,5 km de ancho, que se completa con el sector del lado N. llamado por ello el Norte, mucho más pequeño y separado del cuerpo principal (...) Alcanza una altura s.n.m. de 388 m, pero buena parte de la misma corresponde al terreno sobre el que se levanta, ya de por sí elevado." (Diccionario de topónimos de Lanzarote. A. Pallarés, pg. 217) -por encima de los 300 m-

15 minutos después, 120 m de desnivel y 1 km más de recorrido, encaramos el tramo final del pateo, no sin antes


echar un vistazo atrás para observar la silueta de Mtña Tinasoria desde esta perspectiva y esperar la incorporación de los rezagados.
Dado lo avandado de la hora, pasamos raudo por el cráter de Mtña Mojón
y al final de este cono volcánico
nos detenemos brevemente para admirar las vistas de Las Montañas del Fuego. Son las 13:41 y llevamos 6 km de caminata.
Partiendo de una altura aproximada de 320 m. s. n. m., a partir de ahora el trayecto  es siempre hacia abajo.

A la izquierda del camino dejamos Mtña Casa y a la derecha La Caldereta. Así que en un suspiro llegamos a la iglesia de Uga, nuestro lugar de destino.
Ha sido una extensa y grata jornada, con 7,27 km recorridos en 3 horas y 41 minutos. 329 m, desnivel acumulado de subida y 467 de bajada (esto ocurre por ser un itinerario lineal y el punto de salida es más alto que el de llegada, 450 y 207, respectivamente).



Por si tienen curiosidad por saber qué tipo de plantas hay por donde hemos estado, pueden consultar este enlace en el que aparecen muchas de las encontradas en diversas incursiones realizadas por la zona:
lanzarote-naturaleza-historiaycultura.blogspot.com/search/label/botánica




Para saber más:

  • Eduardo Hernández-Pachecho "Por los campos de lava. Relatos de una expedición científica a Lanzarote y a las Isletas canarias. Descripción e historia geológica (1907-1908)" Ed. de Torcusa para la Fundación César Manrique  Madrid 2002
  • VV. AA. "Geografía. Lanzarote: Geografía de un espacio singular" Cabildo de Lanzarote. Gran Canaria 2002.
  • Carmen Romero "El Relieve de Lanzarote" Cabildo de Lanzarote Gran Canaria 2003
  • VV. AA. "Parque Nacional de Timanfaya. Guía geológica" IGME y Everest. León 2010.
  • Agustín Pallarés "Diccionario de topónimos de Lanzarote" Ed. Remotas Gran Canaria 2014.
  • http://www.geoparquelanzarote.org/
  • Jaime Gil y Marta Peña "Flora Vascular de Lanzarote" Cabildo de Lanzarote Gran Canaria 2018.
  • http://biologiayctma.com/floralanzarote/